Tras un verano de Colonias, cargado de
diversión en el que nuestros/as menores han viajado a través de diferentes
épocas disfrutando con los cinco sentidos, partieron el pasado día 25 de Agosto a un
nuevo mundo, con una gran maleta repleta de ilusión y ganas de paralizar de nuevo
el tiempo.
Este año han sido 100 menores los
que han podido aprovechar esta gran experiencia de compartir una semana en el
espacio natural, el Cerro de Andévalo, conviviendo con compañeros/as de las diferentes
zonas de Sevilla y municipios de la provincia.
El campamento de este año ha
tenido como objetivo fortalecer la cooperación y la cohesión trabajada durante
todo el curso, a través de gymkhanas deportivas y culturales actividades de
aventura, orientación en el municipio de Santa Bárbara de Casa y divertidas veladas,
en las que debían trabajar en equipo, aportando cada uno/a de ellos/as su mayor
potencial, y por supuesto, viviendo cada juego y actividad como si lo
descubriesen por primera vez.
Esta semana ha estado cargada de
emociones, de risas, alegría y sueños compartidos.
Para los más pequeñajos ha sido
todo un reto, en el que no solo han mostrado crecer y aprender cada segundo,
sino que han transmitido a todos y todas la inocencia e ilusión con la que
participar y saborear cada juego.
Para los adolescentes, ha sido toda una oportunidad donde fortalecer toda la intervención realizada no solo durante el último curso, sino en todos los años de trabajo, y empoderarlos, potenciando las grandes habilidades y capacidades que tienen. Han apoyado y reforzado que todos y todas participasen, que cada uno/a de los/as compañeros/as viviera esta experiencia, en la que unidos todo es mejor, y aunque el recorrido sea más lento, el resultado es mucho más gratificante, solo por poder compartirlo juntos.
Un reto que se ha logrado con
creces, y además, cada uno de ellos/as ha dejado una gran huella en el corazón
de sus nuevos amigos y amigas, sin poder olvidar los momentos compartidos y las
grandes personas conocidas.